lunes, julio 16

Morir en Occidente

"La literatura de Arlt, considerada como armario o subterráneo, está bien.
Considerada como salón de la casa es una broma macabra.
Considerada como cocina, nos promete el envenenamiento.
Considerada como lavabo nos acabará produciendo sarna.
Considerada como biblioteca es una garantía de la destrucción de la literatura.
O lo que es lo mismo: la literatura de la pesada tiene y debe existir, pero si sólo existe ella, la literatura se acaba."

R. B.


Se podía leer en varios lugares, pero ahora es uno de los capítulos de El secreto del mal, el desguace chupasangre, póstumo y maleducado de la computadora personal de Roberto Bolaño.

Directo desde la contratapa:



"Este volumen viene a ser el torso (o la armadura inevitablemente incompleta) del que iba a ser el cuarto libro de relatos de Roberto Bolaño. El puñado de piezas y esbozos narrativos aquí reunidos tiene por base un archivo de texto muy tardío en el que Bolaño estuvo trabajando hasta poco antes de su muerte. A él se han agregado otros cuentos y fragmentos espigados entre el abundante material almacenado en el ordenador del escritor, minuciosamente rastreado por Ignacio Echevarría."


Una manga de irrespetuosos. Me recordó lo que Taschen hizo con Frida, al editar (¡en facsímil!) su diario personal y secreto.